En Hawthorne un policía acribilló a un perro que le estaba ladrando luego de detener a su dueño por filmar un procedimiento que había realizado.
Al no soportar los ladridos del animal sacó su arma y le disparó cuatro veces, dejándolo agonizante sobre la calle. El animal murió a los pocos minutos.
Leon Rosby fue detenido luego de grabar con su teléfono movil una intervención en una de las casas de su barrio. A pesar de saber que lo que estaban haciendo iba contra sus derechos, el hombre accedió a ser detenido luego de dejar a su perro Rottweiler Max dentro de su auto.
Sin embargo al ver como tres de los policías aplicaban excesiva fuerza en la detención de su dueño el perro logró escapar del auto y comenzó a ladrar y a tirar mordiscones a los policías, con la intención de defenderlo.
Uno de los policías se sintió intimidado por el animal y a pesar de las súplicas de algunos de los vecinos presentes (uno de los cuales grabó y subió el video de los sucedido) y del propio Rosby, el hombre disparó cuatro veces contra Max, quien cayó herido de muerte y murió en la calle.
